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¡Aguas! No caigas en la trampa: ¡tu WhatsApp no es una mina de oro para los "vivos"!

Smart World junio 13, 2025

 ¿Quién no tiene WhatsApp hoy en día? Desde la abuela que manda sus buenos días con imágenes de flores, hasta el chavo que organiza la reta de fut, esta aplicación ya es parte de nuestro día a día. Pero, ¡aguas! Así como nos facilita la vida, también se ha vuelto el caldo de cultivo perfecto para la delincuencia. Sí, esos "vivos" que andan viendo cómo le sacan provecho a la gente, ahora le echan el ojo a tu cuenta de WhatsApp para hacer de las suyas. Y no es cuento, eh, ya hay un montón de gente que ha caído en la trampa y se ha quedado sin sus datos, sin su dinero y hasta con un buen susto.

Imagen ilustrativa generada con Gemini

El modus operandi: la movida del "código mágico"

Imagínate que estás en tu casa, bien a gusto, y de repente te llega un mensaje. Puede ser de un amigo, de un familiar, o de alguien que ni conoces. El chiste es que te piden que les pases un código de seis dígitos. Y ahí es donde empieza el enredo. Algunos te dicen que es para un concurso, otros que para una encuesta, o de plano te sueltan un pretexto bien chafa. Pero lo importante es que ese código es la llave de tu WhatsApp.

¿Cómo funciona este chanchullo? Los malandros, primero, le roban la cuenta a alguien que ya conoces. A tu compadre, a tu prima, a tu vecino. ¿Y cómo le hacen? Pues hay varias maneras, pero una de las más comunes es con un mensajito que parece inofensivo, pero que en realidad es un anzuelo. Te mandan un enlace "sospechoso" y si le das clic, ¡adiós! Tu cuenta ya está en sus manos.

Una vez que tienen el control de la cuenta de tu contacto, se hacen pasar por él. Te escriben con su nombre, con su foto de perfil, y te dicen: "Oye, me equivoqué de número, ¿me pasas el código que te llegó a ti por SMS?" O te dicen que están participando en un concurso y que necesitan tu ayuda con ese código. La verdad es que usan cualquier pretexto para que tú, ¡ingenuo!, les pases ese numerito que te llega por mensaje de texto.

Ese código no es otra cosa que el código de verificación de WhatsApp. Cuando tú instalas la aplicación por primera vez, o cuando la reinstalas en otro celular, WhatsApp te envía un código de seis dígitos a tu número de teléfono para asegurarse de que eres tú el dueño de la cuenta. Si tú les das ese código a los malandros, ellos lo meten en su celular y ¡pum! Tu cuenta se abre en su aparato y se cierra en el tuyo. En ese momento, tu WhatsApp ya no es tuyo, es de ellos.

Y no creas que solo pasa con mensajes de texto. También te pueden llamar por teléfono, haciéndose pasar por algún servicio técnico o por alguna empresa. Te dicen que hay un problema con tu cuenta, que necesitas verificar unos datos, y te piden el dichoso código. ¡Es la misma gata, pero revolcada! La idea es que les des ese acceso para que ellos puedan entrar a tu información.

El "bisne" de los "vivos": ¿qué hacen con tu WhatsApp?

Una vez que tienen tu cuenta, los "vivos" no se quedan cruzados de brazos. Le sacan jugo a tu WhatsApp de varias maneras, y todas ellas son para fregarte:

  • Piden lana a tus contactos: Esta es una de las movidas más comunes. Se hacen pasar por ti y les escriben a todos tus contactos pidiéndoles dinero prestado. "Oye, me urge, estoy en una bronca, ¿me prestas mil varos? Te los pago mañana sin falta". Como tus contactos confían en ti, es muy probable que caigan en la trampa y les depositen la lana. ¡Y adiós dinero! Después, cuando te das cuenta, ya es demasiado tarde y tus amigos o familiares se quedan sin su dinero. Es un doble golpe, porque aparte de que te robaron, quedas mal con tu gente.
  • Extorsión con tus "pack": Si eres de los que comparte fotos o videos íntimos con tu pareja o amigos, ¡cuidado! Los malandros revisan tus chats y si encuentran algo comprometedor, te extorsionan. Te amenazan con difundir tus fotos o videos si no les das dinero. Y esto es bien gacho, porque aparte de que te roban, te humillan y te exponen.
  • Venta de bases de datos: Tu WhatsApp tiene un montón de información valiosa: tus contactos, tus fotos, tus conversaciones, tus ubicaciones. Toda esa información la pueden vender a otros delincuentes que la usan para otras estafas, para mandar spam o para cualquier cosa que se les ocurra. Es como si abrieras la puerta de tu casa para que entren a saquear tus cosas.
  • "Phishing" y estafas con enlaces: Aprovechan tu cuenta para enviar enlaces maliciosos a tus contactos. Estos enlaces pueden ser para sitios web falsos que roban información, o para descargar virus en los celulares. Así, la cadena de estafas se extiende y más gente cae. Es como una enfermedad que se propaga de un celular a otro.
  • "Espionaje" y robo de identidad: Aunque no siempre buscan dinero, a veces los malandros quieren tu información para robar tu identidad. Con tus datos pueden abrir cuentas bancarias, pedir créditos, o hacer cualquier tipo de fraude a tu nombre. Imagínate que de repente te llega un estado de cuenta de algo que nunca compraste. ¡Así de grave puede ser!
Imagen ilustrativa generada con Gemin

¡No te dejes engañar! Los focos rojos que debes prender:

Para que no te agarren en curva, aquí te dejo unos "focos rojos" que debes prender si te llega un mensaje sospechoso:

  • Mensajes de "emergencia" que piden dinero: Si un contacto te pide dinero de forma urgente, sin darte mucha explicación, y te dice que le deposites a un número desconocido, ¡desconfía! Lo primero que debes hacer es llamarle a esa persona por teléfono para confirmar si de verdad necesita el dinero. No te fíes solo del mensaje.
  • Códigos de seis dígitos sin que tú los pidas: Si te llega un SMS con un código de seis dígitos y tú no estabas tratando de iniciar sesión en WhatsApp, ¡ni se te ocurra compartirlo! Ese código es solo para ti y para tu cuenta. Si alguien te lo pide, es porque te quiere robar tu cuenta.
  • Pretextos raros o inverosímiles: Si te dicen que están participando en un concurso, que necesitan tu ayuda para un trámite o que se equivocaron de número, y te piden el código, ¡es puro cuento! No te dejes llevar por la curiosidad o por querer ayudar.
  • Mensajes con faltas de ortografía o redacción rara: A veces los malandros no se esmeran mucho y sus mensajes tienen errores. Si ves que un mensaje de tu "amigo" está mal escrito o suena raro, ¡sospecha! Podría ser una señal de que no es él.
  • Links o archivos "sospechosos": Si te mandan un enlace o un archivo y no sabes de qué se trata, ¡no le des clic! Podría ser un virus o un anzuelo para robar tu información. Es mejor preguntar antes de arriesgarte.
  • Presión para que actúes rápido: Los delincuentes siempre te presionan para que actúes de inmediato, para que no te dé tiempo de pensar o de investigar. Si te dicen que es "urgente" o que "se acaba el tiempo", ¡ponle un freno! Es una táctica para que caigas.

¡Ponte trucha! Medidas para proteger tu WhatsApp:

Ahora que ya sabes cómo operan estos "vivos", es hora de que te pongas las pilas y protejas tu WhatsApp para que no te metan un gol:

  • Activación de la verificación en dos pasos: Esta es la medida de seguridad más importante. Entra a la configuración de WhatsApp, luego a "Cuenta" y después a "Verificación en dos pasos". Ahí puedes crear un PIN de seis dígitos. Cada vez que intentes activar tu WhatsApp en un celular nuevo, te pedirá ese PIN. Así, aunque los malandros tengan tu código de verificación, no podrán entrar a tu cuenta sin tu PIN. ¡Es como ponerle una segunda cerradura a tu puerta!
  • No compartas el código de verificación: ¡Grábatelo bien! El código de seis dígitos que te llega por SMS es solo para ti. No se lo des a nadie, ni a tu mamá, ni a tu mejor amigo, ni a un supuesto "empleado" de WhatsApp. ¡Nadie!
  • Desconfía de mensajes que piden dinero: Si alguien te pide dinero, primero llámale para confirmar. No te fíes solo del mensaje. Si no puedes contactar a esa persona, sospecha.
  • Checa bien los remitentes: Antes de darle clic a un enlace o de responder un mensaje, asegúrate de que el remitente sea quien dice ser. Si el número no te cuadra o el nombre está raro, ¡no te arriesgues!
  • Actualiza tu WhatsApp: Mantén siempre la aplicación actualizada. Las actualizaciones de WhatsApp incluyen mejoras de seguridad que te protegen de nuevas amenazas. Es como si le hicieras un "tuneo" a tu celular para que esté más seguro.
  • No le des clic a enlaces sospechosos: Si un enlace te parece raro, o si no sabes de qué se trata, ¡no lo abras! Podría ser un virus o un anzuelo para robar tu información.
  • Usa un antivirus en tu celular: Un buen antivirus te ayuda a proteger tu celular de programas maliciosos que pueden robar tu información. Es como tener un guardaespaldas para tu teléfono.
  • Infórmate y comparte: Platica con tus amigos, familiares y conocidos sobre estos riesgos. Cuéntales cómo operan los delincuentes para que ellos tampoco caigan en la trampa. La información es poder, y entre más gente esté enterada, menos "vivos" habrá haciendo de las suyas.

Si ya te la dejaron caer, ¿qué hacer?

Si a pesar de todas las precauciones ya te robaron tu cuenta de WhatsApp, ¡no todo está perdido! Aquí te dejo qué hacer para recuperar tu cuenta y minimizar los daños:

  • Actúa rápido: Lo primero es intentar recuperar tu cuenta. Desinstala y reinstala WhatsApp en tu celular. Cuando lo hagas, WhatsApp te pedirá el código de verificación de seis dígitos que te enviará por SMS. Introdúcelo y si todo sale bien, tu cuenta se activará en tu celular y se cerrará en el de los delincuentes. A veces, si el delincuente activó la verificación en dos pasos, te pedirá un PIN que tú no conoces. No te preocupes, WhatsApp tiene un mecanismo para recuperar el control.
  • Pide ayuda a tus contactos: Inmediatamente después de recuperar tu cuenta, o si no la puedes recuperar, avísale a todos tus contactos que te robaron la cuenta y que no les hagan caso si les piden dinero o información. Puedes hacerlo por llamada telefónica, por redes sociales o por otro medio. Es importante que les avises rápido para que no caigan en la estafa.
  • Denuncia a WhatsApp: Puedes enviar un correo electrónico a support@whatsapp.com explicando lo que pasó. Proporciona toda la información que puedas, como tu número de teléfono, la descripción de lo sucedido y cualquier captura de pantalla que tengas.
  • Denuncia ante las autoridades: Es importante que hagas la denuncia ante las autoridades de tu localidad. En México, puedes acudir a la Fiscalía General de la República (FGR) o a la fiscalía de tu estado. Ellos te orientarán sobre los pasos a seguir y te ayudarán a investigar el caso. A veces no se recupera el dinero, pero la denuncia ayuda a que se tenga un registro de los delitos y a que las autoridades puedan actuar.
  • Revisa tus otras cuentas: Si tienes vinculadas otras cuentas a tu WhatsApp, como tu cuenta de Google o de Facebook, revisa la configuración de seguridad para asegurarte de que no haya habido accesos no autorizados. Cambia tus contraseñas por si acaso.
  • No te desanimes: Aunque sea un trago amargo, no te desanimes. Aprende de la experiencia y sé más precavido en el futuro. Recuerda que los delincuentes siempre están buscando nuevas formas de engañar, pero si estamos bien informados, podemos protegernos.

En resumen, el robo de cuentas de WhatsApp es un peligro real y está a la orden del día. Pero con un poco de "colmillo" y siguiendo las recomendaciones de seguridad, puedes proteger tu información y evitar ser una víctima más de estos "vivos". ¡No le des alas a la delincuencia y ponle un candado a tu WhatsApp! ¡Más vale prevenir que lamentar!

Fuentes de Consulta:

Smart World

Publicado por Smart World

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